Seguridad fotobiológica en la iluminación

 

 

La seguridad fotobiológica hace referencia al riesgo potencial de lesión fotoquímica del ojo provocada por la radiación electromagnética de fuentes de luz, principalmente en longitudes de onda de entre 400 nm y 500 nm.

Marco legal

Para la evaluación de la seguridad fotobiológica de la radiación óptica emitida por lámparas, existen prescripciones de medición y escalas de evaluación establecidas en la norma internacional IEC 62471:2006. En Europa esta norma ha sido adoptada con la designación EN 62471:2008, la cual es acorde con la directiva europea 2006/25/CE.

Evaluación del riesgo por luz azul derivado de las fuentes de luz

Para la evaluación del riesgo fotobiológico se distingue entre diversos rangos de longitudes de onda: radiación ultravioleta (UV), radiación visible y radiación infrarroja (IR). El factor determinante para su clasificación es la profundidad de penetración en el tejido humano. Por ejemplo, la radiación UV es absorbida en las capas de tejido externas. El riesgo existente y los valores límite especificados varían en función de la intensidad luminosa producida. Esto quiere decir que el riesgo aumentará cuanto mayor sea la cercanía a la fuente de luz (independientemente de su tamaño).

Esto no es así en el caso del riesgo por luz azul. Este tipo de radiación atraviesa la córnea del ojo y se reproduce en la retina. Las fuentes de luz pequeñas dotadas de una gran luminancia provocan un riesgo local elevado. En cambio, la misma radiación emitida por una fuente de luz extensa se distribuye por una superficie más amplia, provocando un menor riesgo.

Clasificación del riesgo de lámparas y luminarias

Para todos los tipos de riesgo existen protocolos de medición y valores límite de radiancia o irradiancia que permiten clasificar las lámparas en grupos de riesgo de nivel 0 a 3.

Descripción basada en la norma EN 62471. Los grupos de riesgo toman como referencia la misma distancia del ojo con respecto a la fuente de luz. Debido a que la luminancia no puede aumentarse por medio de sistemas ópticos, reflectores, etc., la fuente de luz representa el mayor riesgo existente y su clasificación puede adoptarse también para la luminaria.

A partir del grupo de riesgo 2, las lámparas deben identificarse y dotarse de una señal de advertencia que indique el riesgo fotobiológico y las medidas necesarias para evitar lesiones oculares.

Hallará más información sobre el riesgo derivado de la luz azul en www.zvei.org/presse-medien/publikationen/fotobiologische-sicherheit-in-der-beleuchtung

Si tiene alguna duda sobre el riesgo por luz azul, los valores específicos de las luminarias XAL o determinados componentes, póngase en contacto con: tech.lab@xal.com.